viernes, 17 de agosto de 2007

Expresión graffiti

Publicación para el diario La Estrela de Iquique, Chile.

La semana pasada, enfatizábamos en la importancia y la “necesidad” de interiorizarnos en profundidad en el constructo cotidiano y mecanismos de proximidad al interior de las tribus urbano juveniles.

Precisamente, una de las expresiones que hace más visible a ciertas tribus -especialmente hip- hop- y nos señala el origen de aquel ímpetu invisible al interior de dichos grupos, va a ser representado en las calles de nuestra ciudad, a través de los denominados graffiti.

El graffiti como acto de creatividad y comunicación del ser humano no es nada nuevo. Su origen se remonta a periodos arcaicos, en donde cerros, cuevas, paredes y rocas, servían para expresar inquietudes y modo de vida de los habitantes de ciertos lugares.

Sin embargo, con el transcurso de los siglos, esta expresión a cobrado otro cariz, esta vez, no en el ámbito rupestre sino en el seno de las grandes ciudades, pudiendo ser considerados como verdaderos “geoglifos urbanos” de un alto contenido simbólico.

De esta forma, mediante el graffiti, los tags (firmas personales o grupales) y los stencil, ya sea en base a dibujos, colores, formas o símbolos indescifrables para muchos de nosotros. La juventud actual busca plasmar en las murallas de la ciudad, aquel descontento, pertenencia territorial o simplemente notoriedad social, respecto de un mundo que se les presenta nuevo, abierto a sus propias experiencias.

Aunque la ciudad y sus símbolos, son inseparables el uno del otro, al menos cuatro posibles opiniones nos señalan aquella tensión respecto a este arte callejero y la ciudadanía en general.

Primeramente, pueden ser vistos desde el rechazo categórico por parte del ciudadano contrario a la intervención del patrimonio propio o cultural. Pueden pasar inadvertidos o ignorados por los transeúntes en general. Además, pueden ser considerados como pintorescos o de mal gusto, aunque sin entender su contenido. Por último, pueden ser contemplados y comprendidos a cabalidad, desde la mirada de los “expertos” mayoritariamente jóvenes, los cuales se relacionan directa o indirectamente con este tipo de expresión.

Señalado lo anterior, la carencia de espacios de sociabilidad habilitados para esta y otras expresiones artístico juveniles, nos señalan la necesidad de la puesta en marcha de iniciativas tanto públicas como privadas, lo cuales favorezcan a su regulación y a la vez a su desarrollo por intermedio de iniciativas creativas. Algo que hemos podido apreciar, el día jueves pasado en la ciudad de Santiago, donde cinco estaciones del metro, molestos de ser “victimas” del rayado de ciertos grupos, tomaron como iniciativa y en consideración el trabajo de algunos graffiteros para la creación artística y decorativa de dichas estaciones, lo cual de manera inteligente, pudo integrar a la juventud y a la ciudadanía en general, evitando el rayado indiscriminado de los muros del metrotren. Un ejemplo a seguir desde la mirada local, considerando que nuestra ciudad, tiene calles como Baquedano, invaluable como patrimonio cultural, el cual es intervenido en reiteradas ocasiones por ciertos grupos de jóvenes, dejando un resquemor tanto para los turistas como para el iquiqueño tradicional.

No hay comentarios: